Seguramente no os importara un rábano pero soy Ingeniero Informático. A mi me gusta enfatizar lo de ingeniero ya que mi familia, mis amigos y conocidos ya enfatizan lo suficiente lo de informático y me llaman para cualquier cosita que les ocurra con sus computadoras… o cualquier otro aparato que funcione con electricidad. Y cuando les digo que no se como repararles su anticuada televisión de los años 90 me sueltan la célebre frase de ‘pues vaya informático estas hecho’. Con todo esto quiero indicar que la de informático es una de las profesiones más despreciadas por la sociedad. Sin embargo hay dos profesiones que todavía son más despreciadas y mal vistas que la mía: abogado y paparazzi.
Si, los paparazzi, esos tipos armados con sus cámaras que siguen día y noche a las celebrities para sacar la foto más comprometida usando todo tipo de ardides, no están bien vistos. Seguramente a ti también se te caería la cara de vergüenza si te sale un hijo paparazzo pero, ¿alguna vez te has preguntado de dónde viene ese nombre? ¿Por qué paparazzi (plural) y paparazzo (singular)?. Pues la historia es muy curiosa y cinematográfica:
‘La Dolce Vita’ es una de las grandes obras maestras de Federico Fellini, ganadora de la Palma de Oro del Festival de Cannes y de dos Oscars de Hollywood. La película está formada por pequeñas historias de la alta sociedad romana contadas por las palabras del cronista Marcello (el gran Marcello Mastroiani) y su fotografo Paparazzo (Walter Santesso), un tipo sin escrupulos que mete el hocico en cualquier lugar donde pueda haber algo noticiable y/o escandaloso.
Desde aquel lejano 1960 en Italia los fotografos de sociedad empezaron a ser conocidos como pararazzis en honor a Paparazzo y poco después la palabra, como antes lo fueron la mafia y la pizza, fue exportada a los Estados Unidos y, desde allí, al resto del mundo, incluido nuestro pequeño rincón del sur de Europa.
Os dejo con la escena más famosa de tan magnifica película, para que no digáis que este blog no es cultura: