Donde hubo fuegos, cenizas quedan
Esta es una de esas verdades como puños que seguro que a más de un@ le han traído por la calle de la amargura. Porque siempre que hemos tenido nuestros affairs amorosos con alguien, al final del todo cuando créeme que la tempestad ha pasado y lo único que queda es la apacible calma del olvido… vuelven a aparecer eras cenizas que nos queman y tanto nos molestan. Y esa ceniza, para María Valverde, tiene ojos, pelo y nombre: Clara Lago.
Como ya sabréis, la muchacha estuvo durante un tiempo coqueteando y metiéndose bajo las sábanas de Mario Casas, pero al final el asunto no cuajó y pasaron a otra cosa mariposa. Pero, casualidades del destino que a veces es un poco cojonero, los tres se han vuelto a reunir en amor y compañía y no precisamente para tomar un café por un par de minutos.
Que va, que les toca compartir presencia durante varios meses sin importarle a nadie si este triángulo amoroso que nos ha salido aquí, agrada o desagrada a alguien. Todos ellos están rodando juntos ‘Tengo ganas de ti’, una película en la que María Valverde y Clara Lago participan y en la cual se encuentran (por exigencias del guión) tremendamente enamoradas de nuestro masculino y macizorro Mario Casas.
Y claro, todo es ficción y no tienen porque preocuparse en absoluto de lo que pase o deje de pasar, claro que sí. Pero el problema está en que entre toma y toma, los personajes salen a fumarse un piti, a tomarse su café, a charlar sobre el krausoinstitucionalismo y esas cosas que hacen los actores. E imagino que para la nueva y actual (de momento) churri de Mario Casas, ver como una ex se le acerca cada dos por tres a su chico vestida con ese traje de plumas cual pavo en celo… pues no tiene que ser muy agradable, sinceramente. Esos celos que nos comeny nos devoran… ¿cómo creéis que llevará la pobre muchacha todo esto? ¿Cómo una gran profesional o como un gran ser humano?