Curioso, pero cierto, vamos para que luego no se diga que los españoles somos unos juerguistas de cuidado (y con razón), si es que nos da igual celebrar las propias fiestas que las de los demás, el tema es celebrar. Y es que si Hollywood tuvo su gran noche de los Oscars, Madrid no iba a ser menos y también organizó un evento con ese mismo motivo del reparto de estatuillas doradas, con desfile de famosos y todo.
Sí, ahí tenéis un claro ejemplo de que nosotros también nos podemos calzar grandes galas para la alfombra roja o del color que sea, que nosotros eso nos da igual, que la cuestión es salir de casa. De hecho como gran protagonista de la noche tenemos a María Castro que se plantó un vestido digno de Teatro Kodak, vamos que alguna de las que vimos ayer bien podía haber tomado nota de nuestra actriz, aunque ese pelo, nena, no te hace justicia, cara pan sí, justicia no. Pero no sólo ella se puso vestidazo, Úrsula Corberó y Andrea Duro se pasearon como profesionales de este tipo de eventos, seguidas muy de cerca de Norma Ruiz que fue con algunos de los miembros del elenco de ‘Tensión Sexual no Resuelta’ para aprovechar el tirón y hacer algo de promoción.
Aroa Gimeno fue otra de las que se lo tomó bastante en serio y se calzó también vestizado con media espalda al aire, vamos que si tiene que ir a la de verdad no sé cómo iría. Más informal Raquel Sánchez Silva o Toni Acosta.
Y ya mucho más de calle vimos a Irene Visedo cuyo pelo me trastorna y sobrecoge, de verdad que cuánto daño hicieron los ochenta y lo peor es que vuelven… Habría que matar a ese peluquero, con lo mona que es esta chica quién la habrá engañado para esa permanente. Sara Velázquez y Ana Álvarez tampoco se lo perdieron.
Y entre los chicos voy a destacar a estos: a Alberto Ammann uno de los grandes descubrimiento del cine patrio y de el sector femenino porque no me disgusta nada, nadita, José Ángel Trigo que no se pierde una últimamnete, Iker Lastra o Miguel Ángel Muñoz haciendo patria de película.
Eso sí, de los chicos me quedo, sin duda con David Castillo de ‘Aída’ porque sí que se lo tomó en serio a diferencia del resto de machotes y apareció con su esmomquin, de punta en blanco… vamos que ni sombra del Jonathan.
Lo que está claro es que no nos perdemos una.
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Fotos | Daylife