Suena a documental de la sabana africana pero no, es una realidad como la copa de un pino: Scarlett Johansson ha sacado sus armas de mujer despechada y ha decidido que su nuevo objetivo es Justin Timberlake. Y ya se puede poner por delante la infantería de Colorado que ella tiene muy claro que ahora que está sola y descompuesta y que Ryan Reynolds, su ex-marido buenorro (porque hija, mira que dejarle estando como está el muchacho), ha encontrado consuelo y amor en Sandra Bullock (si es que Dios los cría y ellos solitos se juntan unos con otros), ella que es muy digna y muy orgullosa, ha decidido hacer lo propio con uno de sus antiguos amores, Justin Timberlake, algo que no le ha hecho ni pizca de gracia a Jessica Biel como podéis imaginar, que la ve venir como quien ve a la plaga de pulgón cuando ya tiene el geranio en su poder.
Desde luego que ganas de vivir no se puede negar que la ex-pareja tenga, porque eso de ‘A rey muerto, rey puesto’ se lo han aplicado muy rapidito y a la perfección. No se andan con chiquitas y quieren recuperar el tiempo perdido, así que cada uno ha tomado caminos distintos y la verdad es que no les va nada mal según parece. Eso sí, la diferencia es que mientras que a Sandra Bullock le encanta que le bailen el agua, Jessica Biel está con la uñas fuera y el bolso preparado por si hay que atizarle una leche en toda la cara a la Johansson por pasarse de lista y de lagarta con su Ryan Reynolds.
Scarlett estaba por Justin antes de enamorarse de Ryan y ahora que se están divorciando Jessica teme que los antiguos amantes retomen su relación allí donde la dejaron. Después de todo, Justin estuvo quedando con Jessica y Scarlett simultáneamente en un momento. Jessica siempre miró hacia otro lado y le dio a Justin su espacio cuando lo necesitó. Estuvieron separados un tiempo, y luego volvieron. Pero ahora está preocupada por que todo cambie con una Scarlett soltera en escena
Hombre, yo llego a ser Jessica Biel e igual si que me asusto un poco. Luego tendría que hacer lo que dicen de pararme a pensar en los dos, en que si de verdad me quiere y le quiero no tendría porque preocuparme, en que estas cosas siempre pasan (oye, que me he metido en el papel de Jessica y con eso de que me estoy imaginando con Justin en la cama todas las noches, como que se me enamora el alma), que es ley de vida… pero en el fondo la estaría, como estará ella, echa un flan por lo que pueda pasar.
Que no olvidemos que la Scarlett Johansson es mucha Scarlett Johansson, y que parece que va de tonta sin haber roto un plato y luego te la mete doblada… cuidadín.