No me he atrevido a felicitarle los años en su momento, hace unos minutos, porque todos sabemos que al grande entre los grandes no le gusta admitir que cumple años como todos aquellos míseros mortales a los que tanto respeta.
Porque todos sabemos que Chuck es inmortal, que pase lo que pase su patada giratoria con 70 tacos a sus espaldas seguirá siendo el arma de destrucción masiva más temida, sólo superada por la cutrez que desprende su propia página web.
Esté o no haciendo películas, haga o no más capítulos de "Walker, Texas Ranger", su carisma y sus poses son siempre dignas de mención, sólo superadas por sus declaraciones tan osadas como sus patadas:
Obama salva vidas en Haití y ¿las elimina en USA?
Pues hijo, tampoco vamos a entrar en esos temas, que yo no me veo con fuerza y a ti enseguida se te van los puños... Sólo espero que con setenta tacos sigas dando tantas frases míticas como hasta ahora, y que algún día nos desveles a todos la fórmula para dividir por cero.