Supongo que a estas alturas, todos aquello que seguisteis la Gala de los Premios Goya 2011 con nosotros en directo o por vuestra cuenta (muy mal teniéndonos a nosotros), sabréis que no estuvieron exentos de polémica. Además del tema de la Ministra, de Álex de la Iglesia y demás, la gala estuvo marcada por la nueva aparición del espontáneo Jimmy Jump, saltador profesional y tocapelotas cum laude.
Y es que un año más, después de verle en Eurovisión, se ha vuelto a colar en un gran evento como es éste de los Goya, cosa que me hace plantearme realmente si no está preparado, porque si no es así, la seguridad de este tipo de cosas es una verdadera patata… El caso es que sea como fuere, en el momento en el que se estaba anunciando el Goya al Mejor Actor se coló en el escenario entre todas las actrices que entregaban el galardón y que flipaban en colores con semejante personaje. Vamos que dio el cante como quiso y esperaba, pero eso sí se llevó abucheos por doquier, soy yo y le tiro un Goya a la cabeza…
¿Y quién se llevó el Goya? Pues obviamente, como cabía esperar, Javier Bardem que nos volvió a emocionar con sus palabras…
Y por supuesto, a mi mujer y a mi hijo por despertarme todos los días el corazón y la sonrisa
Así terminó el discurso de agradecimiento tras recibir el premio. Claro que si no decía nada igual le tiran huevos del tamaño del de Lady Gaga después de haber proclamado su amor a los cuatro vientos por su Pe en otros eventos americanos.
Lo que está claro es que Bardem fue el protagonista de la noche después del saltador, no paraban de enfocarle en cada plano, vamos, que como muchos han dicho, parecía una Gala precisamente diseñada para él. Quizá un poco exagerado, pero vamos, que precisamente inadvertido no pasó.
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